Como norma general, recibirás y devolverás tu coche de alquiler con el depósito de combustible lleno. De lo contrario, la política de combustible se reflejará en el contrato de alquiler.
Si no devuelve el vehículo de alquiler con el nivel de combustible acordado, el socio de alquiler le cobrará una tarifa de servicio, así como el coste del combustible faltante.